En una olla grande, coloca el pollo, las zanahorias, el apio, las cebollas y el ajo. Cubre con agua y lleva a ebullición.
Reduce el fuego y añade el perejil, el eneldo, la sal y la pimienta. Cocina a fuego lento durante aproximadamente 1.5-2 horas, hasta que el pollo esté bien cocido y el caldo tenga un sabor profundo.